jueves, 18 de diciembre de 2014

TALLER DE CREACIÓN LITERARIA. TÉCNICAS PARA LIBERAR LA INSPIRACIÓN Y MÉTODOS DE REDACCIÓN

Ejercicio: Mire y escribra. Cuenta la historia que conduce a estos personajes hasta esta misma fotografía.


EL PREDICADOR

Ana Cristina Salazar Yuste


Escombros, cenizas, polvo.
Los muros carcomidos por el paso del tiempo y el abandono, que alertan de una inminente desintegración, se camuflan en la penumbra calcinados por las llamas. El suelo está resguardado bajo una alfombra de malas hierbas que se han ido enraizando en el silencio de la soledad. El silbido del viento se cuela por las ventanas empotradas en la pared de la siniestra fachada, en la que reposa abierta la puerta de entrada a las tinieblas.
El hombre de la gabardina entra en la vieja morada con paso sigiloso, como temiendo despertar al pasado que yace encerrado entre aquellas ruinas.
Merodea por la estancia para descartar la presencia de cualquier otro intruso; sus movimientos certeros evidencian que conoce bien el lugar. Se agacha y recoge un fragmento de cristal fundido por el fuego, resquicio de lo que fue una copa.
En sus manos enguantadas sujeta una cámara de fotos que activa y dispara enfocando el objetivo a una pared, donde solo es perceptible su propia sombra en la nada de aquel funesto refugio. El flash ilumina y prende la evocación de una época lejana.

***

Una vieja melodía suena en la gramola. Las cinco mujeres presentes en la ceremonia litúrgica lucen sus mejores galas. Sus estilos son disímiles, así como su estatus social, mas están fraternizadas por una imantación que trasgrede a la mecánica cuántica: la fe.
Sus rostros alegres destellan emoción ante el acontecimiento que esperan con fanatismo. Como estando al borde del precipicio, hay un brillo en sus miradas que denota cierto deje de temor. No hablan entre ellas, nunca lo hacen, pues solo el Predicador tiene acceso a la palabra:
            ¡Que hable quien porte el mensaje de la salvación, y que calle y acate el que a ella se dirija, pues en el silencio y en la fidelidad al Creador se hallan la clave de la redención! Hermanas, la palabra mal empleada es la peor arma de destrucción, ¡dejad que como elegido os guíe hasta la eternidad! ¡Bebed de mi sangre y purificaros con el humo de la benevolencia!—. El timbre de voz del orador es un tenue susurro, lejos de una ordenanza su mensaje suena a promesa. 
Las chicas le escuchan abstraídas, o tal vez hipnotizadas, y se dejan llevar a la liberación. Como las ratas siguiesen al flautista de Hamelín, las creyentes, enmudecidas y cegadas,  se doblegan al dictamen del Predicador.

***
           
            El hombre de la gabardina observa la instantánea y ve en la imagen su propia silueta en la pared carbonizada. Al igual que en el inmueble solo quedan en él los vestigios de un lejano ayer. Donde antaño hubiese un sofista que embaucaba con sus predicaciones de gloria, ahora no hay más que un bastardo que deambula por los escenarios de sus fechorías para regodearse en los recuerdos de su secreto.
Vuelve a disparar la cámara apuntando esta vez hacia un rincón. La polaroid le devuelve un nuevo retrato revelado. 
Y allí están. Las cinco chicas posan para él desde el más allá con sonrisas fantasmales, intactas y engalanadas, alzando con sed de venganza las copas de cianuro y los cigarrillos incendiarios que borrarían para siempre las pruebas de su crimen…

miércoles, 3 de diciembre de 2014

TALLER DE CREACIÓN LITERARIA. EJERCICIOS CON LA MEMORIA

Ejercicio: Elige una prenda de ropa que ya no esté en tu poder. Descríbela y cuéntanos su "biografía", cómo llegó a tus manos, qué vida le diste, como la perdiste, etc...




EL PRIMER SUJETADOR
Ana Cristina Salazar Yuste

El tejido de algodón llevaba bordada la primavera en la tela blanca. Florecillas de colores lo adornaban por doquier, conservando la inocencia en una prenda tupida de connotaciones femeninas. Un lacito rosa coronaba el centro, marcando el punto medio que separaba el casco izquierdo del derecho. No llevaba aros ni relleno, su diseño básico tenía la  única pretensión de disimular unos senos que empezaban a florecer. 
Era el regalo de cumpleaños de una abuela anhelante de ser testigo y cómplice en el desarrollo de su nieta. Venía en una caja de cartón, junto a unas braguitas. Tal cual quedó embalado durante unos meses, hasta que llegó el momento oportuno.
No traía manual de instrucciones, mas el broche, de dos corchetes, resultó a priori de una gran complejidad que precisó práctica y habilidad para su manipulación.
Se oprimía al torso, marcando la piel con una gomilla que apretaba e incomodaba, que invitaba a liberar los dos secretos. Afortunadamente, con el uso y el agua caliente, cedió hasta amoldarse.
Su jornada era de un día. Fue el primero, no tenía muchos rivales, iba del cajón al busto y de éste a la lavadora, en un ciclo semanal que no duró mucho tiempo pues antes de cumplir las cuatro estaciones quedó obsoleto.
Su calidad era indiscutible, no obstante la elasticidad no estaba entre sus atributos. Fue por eso que, a medida que aumentaba el tamaño de las curvas que debía custodiar, su firmeza fue insuficiente. Se hizo necesaria la destitución y el reemplazo.
Quedó de nuevo confinado en su envoltorio original como un bonito recuerdo que yace, a día de hoy, caduco entre lencería de transparentes encajes y suaves sedas.


lunes, 10 de noviembre de 2014

TE VERÉ EN EL CLÍMAX

Ya a la venta "Te veré en el clímax", la antología de los 26 relatos ganadores del II Concurso Internacional de relatos pecaminosos, entre ellos "La venganza servida en plato caliente".

Nota de prensa: http://contacto-latino.com/redzin/1085518/provocativo-e-inquietante-te-vere-en-el-climax-y-otros-relatos-pecaminosos/

ENLACES DEL LIBRO EN PAPEL:

 Global:  http://www.amazon.com/cl%C3%ADmax-relatos-pecaminosos-Spanish-Edition/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839370&sr=8-1&keywords=te+vere+en+el+climax

España: http://www.amazon.es/ver%C3%A9-cl%C3%ADmax-otros-relatos-pecaminosos/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839658&sr=8-1&keywords=te+ver%C3%A9+en+el+cl%C3%ADmax

Reino Unido:  http://www.amazon.co.uk/ver%C3%A9-cl%C3%ADmax-otros-relatos-pecaminosos/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839737&sr=8-1&keywords=te+vere+en+el+climax

Alemania: http://www.amazon.de/ver%C3%A9-cl%C3%ADmax-otros-relatos-pecaminosos/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839793&sr=8-1&keywords=te+vere+en+el+climax

Italia:  http://www.amazon.it/ver%C3%A9-cl%C3%ADmax-otros-relatos-pecaminosos/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839869&sr=8-1&keywords=te+vere+en+el+climax

Francia: http://www.amazon.fr/ver%C3%A9-cl%C3%ADmax-otros-relatos-pecaminosos/dp/1630650242/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1413839927&sr=8-1&keywords=te+vere+en+el+climax

EN DIGITAL:

Global: http://www.amazon.com/dp/B00OPDPBZW

España:  http://www.amazon.es/gp/product/B00OPDPBZW?*Version*=1&*entries*=0

México:  http://www.amazon.com.mx/gp/product/B00OPDPBZW?*Version*=1&*entries*=0

miércoles, 1 de octubre de 2014

DISSIDENT TALES: "36 BASTARDOS"




Número 3 de la revista Dissident Tales. En la página 55 podéis leer mi relato “36 BASTARDOS”.
IMPORTANTE: No apto para menores de edad ni personas sensibles, contiene escenas de sexo explícito y violencia extrema.

martes, 26 de agosto de 2014

GANADORES DEL II CONCURSO INTERNACIONAL DE RELATOS PECAMINOSOS

El jurado del Segundo Concurso Internacional de Relatos Pecaminosos organizado por Contacto Latino anunció su selección para la antología “Te veré en el clímax y otros relatos pecaminosos”© que será publicado por Pukiyari Editores, bajo su sello Kulei, en papel y digital.
Con la participación de 490 relatos provenientes de 25 países se cerró con éxito la segunda convocatoria internacional, siendo primeramente 100 los relatos  pre-seleccionados, de los cuales 25 fueron finalmente elegidos para conformar el libro.
Mi relato "La venganza servida en plato caliente", estará en esta atrevida antología.

Aquí el enlace a la noticia: http://contacto-latino.com/redzin/1085468/anuncian-ganadores-del-ii-concurso-internacional-de-relatos-pecaminosos-contacto-latino/

miércoles, 6 de agosto de 2014

REVISTA FERIA REAL FERNÁN NÚÑEZ 2014



LA TIERRA NO CABE EN UNA MALETA

“La tierra no cabe en una maleta”, decía mi abuelo.   
Así los veía partir él, como ahora yo los veo, a una lejanía imprevista, cargados de avíos y  el peso amargo de sentir que no se lleva equipaje, sólo un billete de ida en el bolsillo y una foto de recuerdo.  
Expectación, incertidumbre, melancolía, tristeza en sus miradas.
Así partían y así parten.
Lloran como lo hace el recién nacido al corte tajante del cordón umbilical, enclave vital que le une a las entrañas de su madre, a la seguridad única y al calor reconfortante del hogar. Como hijos, la sangre que recorre las venas no se elige, la patria que te ve crecer, tampoco; es tu sello, tu identidad, tu acento. Secan sus lágrimas en el escudo de la bandera que les representa y que a su pesar no les arropa.
No hay remedio ni consuelo. Tampoco hay adiós. Nunca lo hay, porque uno no se despide de sí mismo, supongo, uno no se extirpa sus raíces del todo, pues aunque pueda el corazón asentarse y brotar en otra hacienda, la semilla sólo da buen fruto en el suelo donde germinó. Naces amapola en el trigal, jaramago entre olivos,  azahar de un naranjo, geranio en una reja: naces donde te siembran y allí floreces.
La nación de uno no es algo que se pueda llevar de viaje y portar de un lado a otro, como el canastillo de mimbre en brazos de una gitana cruzando el puente, así como no deberían repartirse las usanzas y tradiciones, las oportunidades, cual claveles granas por un puñado de monedas.
Qué dichoso el destino nuestro, el de los humanos sedentarios, moviéndonos forzados por una realidad torcida y un futuro opaco. Con la libertad soñamos y nos cortan las alas, que no se es más libre por no tener límites geográficos, sino por poder decidir dónde, cuándo y por qué estar.
Reflexiono y me estremezco. Ahora estoy aquí, mañana quién sabe…
Y me quedo pensando ante el andén, contemplando los dos raíles paralelos, infinitos: pasajeros al tren. Y un avión parte en dos el cielo, rompiendo la barrera del sonido, dejando una estela de humo blanco en un cielo azul que debería tornarse verde esperanza: aves migratorias. Y un barco zarpa en el muelle, removiendo un mar en calma que acorta la distancia interminable entre territorios, continentes que se hunden y ahogan en la incomprensión del ir y venir: olas peregrinas.
Así volvían y así vuelven. Con los brazos abiertos a su gente y la alegría de respirar el aire que lleva su esencia, el regocijo de pisar las tablas del pasado. Rememorar y volver a vivir. Partir, siempre hay que partir…
La tierra no cabe en una maleta, porque, sencillamente, nosotros somos el bagaje.

Dedicado a todos los emigrantes, los de ahora, los de antes y los de siempre, forzados a salir en busca de un próspero porvenir, y en especial, a Balduino González, por el afecto que profesa a Fernán Núñez y sus paisanos.

Ana Cristina Salazar Yuste